En ella y
durante toda la noche, desde que se pone el sol hasta que sale a la
mañana siguiente, se canta alabando el poder de la luz, de la consciencia, de
la vida y de Dios, se suele utilizar el mantram “Om Namah Sivaya”, (que
aproximadamente significa, que la luz y el poder del Señor shiva, descienda sobre nosotros y sobre el mundo),
similar al “venga nosotros tu reino”,
del padre nuestro cristiano. En esta noche se realizan “pujas” una forma de
adoración, purificación y bendición, vertiendo liquido sobre la figura de
Shiva. Puede Ser agua con pétalos de flor, agua de azahar, leche - miel., agua
pura y cristalina, etc. El resultante de estas pujas se puede luego beber, o
servir para lavarse y curarse físicamente, en definitiva es agua bendecida.
Las recitación de letanías, tiene como
función evocar e invocar, determinadas fuerzas divinas arquetipicas, que nos
ayuden en el proceso de purificación interior. Movilizando y canalizando
energías por los distintos circuitos, también se pretende romper las barreras
del ego, y penetrar en los niveles subconscientes de la consciencia de Ser y
del Ser. Produciendo un estado continuo de consciencia expansiva. Ahora bien la
recitación de mantram, y otras formas de oraciones, debe de hacerse de forma
consciente, estando la atención presente, continuamente en el proceso y en su
propósito. No sirve, o sirve muy poco la recitación mecánica, rutinaria e
inconsciente. Gran parte del poder de las oraciones esta en permanecer
consciente, así se consigue alejar las distracciones de los pensamientos o del
letargo de la consciencia.
Unas técnicas a seguir podrían ser:
Primero colocarse en actitud de meditación y
de canto. Se recita uno de los mantram de Shiva : “Om Namah Sivaya” o “ Sivaya Namah Om”
los kirtam :
·
Om Shiva Om, Om Shiva Om, Om
Shiva,
Om Shiva Om, Om Shiva Om, Om Shiva,
Om Shiva Om, Om Shiva Om, Om Shiva,
.......
·
Shiva, Shiva mahadeva, namah shivaya, Rada shiva
Shiva, Shiva mahadeva, namah shivaya, Rada
shiva
.......
recitación del mantra Om Namah Shivaya, 108 repeticiones equivalente a
un mala o collar de cuentas. para potenciar la concentración, la
meditación y invocación de la gracia divina, para el recitador, la
humanidad y el mundo en su totalidad.
Cantando todo el tiempo posible. A partir
de ¾ de hora, acompañando cada participante el canto con percusión, los
recitadores, deben movilizarse físicamente, tocando ellos personalmente los
instrumentos, principalmente de percusión, a la vez que cantan la letanía o el
kirtam, esto consigue movilizar energía dinámica. Poco a poco incrementar la consciencia
de Ser en el presente, así todos los pensamientos que no tengan nada que ver
con los que se esta realizando, serán
dejados de lado. Ser consciente del significado del mantram, que es: invocar
las cualidades de Shiva, que son Virilidad, Consciencia y Luz, es aquel aspecto
de la divinidad que posibilita la consciencia viva de Ser.
Continuar con otra fase, donde hay que
tener presente la figura, representativa de Shiva, pasar de la fase dinámica de
canto, música y movimiento a la sensibilización en la inmovilidad, sentir como
si uno fuera el propio Shiva. Es interesante utilizar todos los elementos
representativos, para poder sentir el poder que el encarna, (no confundir la
identidad), es una cuestión de mimetismo. Pintarse la frente con las tres
líneas blancas, ( a ser posible con
pasta de sándalo, o en su ausencia con pintura de maquillaje ), que significan
la purificación de los tres niveles : mentales, emocionales y vitales.
También pintarse el punto o circulo rojo, en la frente, representación y
estimulo del poder de la Shakti, diosa y energía primordial.
Notar el símbolo y la relación con el poder
real del símbolo. Algunas personas creen que un símbolo es solo una cuestión
estética o decorativa. Pero el símbolo es un elemento de poder real, así el
color rojo en la frente, el algo mas es el estimulo del ojo de Shiva, la visión
interior del espíritu, y a la vez es una conexión con el poder femenino, como
poder de vida, vitalidad, fertilidad, menstruación, vagina, etc. Para mucho
vivir el símbolo, les proyectara a su propia realidad, estimulara en ellos,
físicamente, energéticamente, emocionalmente y todos los mecanismos
representandos vivencialmente.
Sentir el poder de mito de Shiva, y todas la
leyendas alegóricas asignadas a el. Al igual que los mitos de la Grecia
Clásica, La mitología Hindú, representa el poder y la explicación de valores
inmortales, camuflados en las narraciones simbólicas, Así el que tenga oídos
para oír, que oiga. El que tenga entendimiento para entender, que entienda. Hay
que saber sacar lo esencial de lo superficial. Se han transmitido grandes
verdades, a lo largo de los tiempos, camufladas en ingenuas narraciones, cuasi
infantil. Aquel que sigue un proceso de búsqueda interior, tiene que estar
alerta, para discernir, y no dejarse distraer, los signos han sido dados, para
que hagamos uso de ellos, pues son formas e imágenes arquetipicas, de valores
reales.
Por ejemplo se dice que Shiva es el Señor del
mundo, que a través de su contemplación visual hacia el tiene del mundo, hace
posible la existencia de la vida.
Un día
el Dios de la consciencia Shiva, estaba contemplando meditativamente la
vida en la tierra, cuando vino su consorte Shakti, símbolo del arquetipo
femenino y de la energía de la vida. Por detrás de el y queriendo juguetear, le
tapo los ojos cual enamorada de su amado. Pero el Dios no quiso interrumpir su
meditación, sabiendo que la humanidad no podía subsistir si no era contemplada
por sus ojos. Noto el caos, sentía el dolor, pero no quiso ceder a la tentación
y al juego de la diosa. Entonces
sintiendo el poder retador de la Shakti en su espalda, Se le abrió un ojo en la
frente, pero a un nivel interior. Con el podía seguir contemplando la vida en
la tierra, pero a la vez podía también ver no solo físicamente lo que
acontecía, sin no que podía ver el interior de todos los seres, sus
pensamientos, sus emociones y toda sus realidades, también noto que este nuevo
ojo, le permitía el poder ver sin los limites de los físicos. Con el podía
también ver cosas no ligadas al tiempo presente y a un espacio concreto, ahora
podía ver también en distintos tiempos y en distintos lugares. Este nuevo ojo
le daba acceso a una gran fuente de conocimiento. Se le denomino a partir de
entonces el Ojo de Shiva, el Ojo de Dios o el Ojo que todo lo ve.
Por ello en las prácticas derivadas del
dios yogui, se intenta estimular y activar el ojo de Shiva, la visión Interior,
el ojo que todo lo ve. Aplicado al shivarati, uno puede intentar activar la
visión interior, mientras se canta, puede sentir como si desde el entrecejo, se
abriera un túnel, que le permitiera ver cualquier cuestión en la que tenga
interés. Practica similar a la realizada por los chamanes amerindios para
buscar o acceder a la Visión reveladora.
Utilizando otra leyenda, la que surgía de
porque sale un chorro de agua de la cabeza de Shiva. Se dice que la diosa
Ganges, quiso desviar el río principal que nutria los cielos, hacia la tierra
para bendecirla con los dones, que gozaba el paraíso celestial. Pero no calculo
el caudal y el poder de tal río. Y en vez de propiciar la fortuna, ocasiono
inundaciones y desgracia. Entonces un rey imploro en oración al dios Shiva que
interviniera, que pusiera remedio a tal situación. El dios conmovido por lo que
ocurría, extendió su cabellera, ínter poniéndola entre el río celestial y la
tierra, recogió el caudal del río hacia su interior, allí apaciguo las aguas y
volviéndola a sacar por lo alto de su cabeza, la dirigió hacia la tierra como
era también voluntad de la diosa Ganges, convirtiéndose así en el gran río de
vida que es.
Para nuestro propósito sentimos el mito,
como una realidad o técnica a seguir, así podemos notar, como después de la
movilización energética, a través del canto y del movimiento, llega el momento
de canalizar la energía, al igual que lo hizo shiva, entonces sentir la
vibración que circula por todo el cuerpo, notarla concentrándose en la base del
cuerpo, entre la zona genital y el ano, luego notar como si se hiciera un
chorro de una especie de agua luz de vida, atravesando el cuerpo en vertical
hacia arriba, saliendo por lo alto de la cabeza como uno o dos metros, desde
donde baña y purifica el exterior y el interior del cuerpo, a todos los
niveles.
Durante toda la shivarati, o practica para
sentir el poder y la bendición de Shiva, ir añadiendo paulatinamente elementos
característicos y actitudes propios de Shiva, como : Pendientes arados de las orejas,( para
estimular los lóbulos de las orejas, y al igual que una sesión de
reflexoterapia, ese estimulo repercute en todo el cuerpo ). Sentir la
estampacion del Om 3ç en la garganta, notar y sentir el efecto de cada elemento:
collar al rededor del cuello hecho de guirnalda de flores, símbolo de bienaventuranza. Unas pequeñas
serpientes a modo de brazaletes, para estimular el tono vital del cuerpo desde
los brazos. Malas (collares de cuentas, para oración y recitación), como
pulseras y tobilleras, para estimular las muñecas y los tobillos. El tridente como cetro de poder, sobre las
tres manifestaciones de la energía gunica (la pasiva, la exaltada y la
armónica). El lingam como símbolo fálico, de la virilidad masculina y dador de
vida consciente y creativa. Una cobra dócil como mascota y vivificadora a modo
de collar. Pintar en la frente las tres líneas blancas, símbolo de la
purificación e iluminación de los tres niveles básicos de Ser, pintar el círculo
o punto rojo, signo del poder de shakti y estimulo de ajna chaka. Sentir como
si se estuviera sentado sobre una piel de tigre, como símbolo de tener el
control sobre los impulsos vitales, e incluso tener la sensación de ir con el
torso desnudo o llevar como prenda una piel de tigre.
Se puede también sentir como si la piel
fuera de color azul. Se dice al respecto que ese color, es debido a que el
viene de las esferas celestiales, que están mas allá del mental. Otros apuntan
a que es debido a que también utiliza sustancias psicoactivas, el denominado
Soma, para elevarse por encima de las percepciones ordinarias. Otra versión
dice que no es de color azul, si no que tiene el cuerpo cubierto por cenizas,
para recordarle su ascesis, su renuncia a la esclavitud egoica, También existe
la referencia de que el descendió desde los lugares celestiales, a la tierra
para enseñar a los humanos la ciencia del yoga, como método para divinizarse y
superar sus limitaciones y sufrimientos egoicos, pero al comprobar el poco o
nulo interés de los humanos, decidió volverse al lugar celestial de su
procedencia. En su viaje de retorno, sintió el sufrimiento y la ignorancia en
que estaba sumergida la tierra y la humanidad, y se le hizo un nudo o bloqueo
en la garganta, quedando azulado de esa congestión, sintió tanta compasión por
el estado de inconsciencia, que decidió quedarse y proseguir su labor de
difusión de la ciencia yoguica, es entonces es azul el color de la compasión..
.
Se puede realizar el mudra de la paz y de
la compasión con la mano derecha, palma hacia adelante. Se pueden realiza
también meditación utilizando un apoyo para el brazo izquierdo. También se puede
hacer meditación utilizando un tambor de una sola mano. Por lo demás es
importante una actitud serena, vital, contemplativa, receptiva, notar su porte, sentir la energía shakti que
circula por todo el cuerpo, estar conscientes de todas las sensaciones e
imágenes si surgen. Puede ser una noche
donde la comunión o el yoga se sienten muy vivo. Un gran impulso evolutivo
individual y colectivo.
...............................
Siento
ahora, como si unos dedos masajearan la espalda, suben y bajan marcando la
columna, relaja mi cuerpo y también miespíritu..
SHIVA, EL ORIGEN HUMANO DE UN DIOS - El Hombre que Conquisto la INMORTALIDAD .. en Diálogos Interdimensionales
Shiva el Señor del Yoga - Mas allá del mito Shiva, fue un ser humano que vivió hace aproximadamente 6.000 años en la India. En su búsqueda Interior Conquisto todo su Ser. Unifico cuerpo y espíritu conquistando la Inmortalidad. utilizo los distintos tipos de Yogas para Realizarse. Ha quedado como un mito y es base fundamental del Hinduismo, pero su ejemplo y autodisciplina lo ha elevado a la Categoría de Ser Uno con la Divinidad. El encarna la perfección. Se Transformo a si mismo y durante milenios es referencia para millones de personas
EXPERIENCIAS COMPARTIDAS
Hoy vamos a dedicar la tarde a la
ceremonia – La Noche de Shiva - la
festividad es durante noche de la segunda luna nueva después del solsticio de
invierno. Durante un corto periodo de tiempo, cantaremos el mantra continuamente
sumándonos a otras gentes para pedir la luz del cielo.
Nos sumamos a los coros y comenzamos el
canto, moviendo el cuerpo para genera la energía necesaria que nos alimentará y
pondrá en marcha la dinamo para atraer mas y más.
En el centro del circulo, aparece un hombre
desnudo, tiene el cabello enmarañado y cubierto de cenizas, es sumamente
delgado, canta y se mece continuamente, con los ojos cerrados, parece que está
con nosotros pero ensimismado. Cuando paramos para sentir nuestro cuerpo, él
con las manos unidas bajo el vientre se detiene también.
Centramos la atención en la base posterior
del cráneo, un poco por encima de la nuca, para recorrer todo el cerebro y
extender la visión a través de la frente. La presión que siento en éste punto
es muy fuerte, casi dolorosa, cuando “miro” hacia delante parece que tenga un
foco de luz, al ladear la cabeza a un lado y otro, esa luz actúa como
disolvente, no sólo para las sombras, si no también, para algo parecido a la
niebla, la deshace con facilidad. Es mucho más importante que iluminar para ver
el universo.
Siento en mi los ornamentos que lleva la
imagen de Shiva, las serpientes enroscadas en los hombros, los aros, la corona
en la parte alta de la cabeza, la alfombra a los pies, las pulseras en muñecas
y tobillos, él collar alrededor del pecho. Poco a poco doy paso a que la
Divinidad se aposente de mi cuerpo, con todos los ingredientes. Noto también
encima de las cejas un punto de calor y como absorbe luz del exterior, entra en
los ojos cerrados y desciende, llega al vientre y queda allí, de los pies sube
por la columna y sale por la coronilla en forma de cascada. Le doy todo el
impulso del que soy capaz para que se llene el lugar. Todos estamos estrechamente
unidos la fuerza de unos se funde con la de los otros, entonces empiezo a ver a
Shiva, sostiene un hermoso bebé en los brazos al que acaricia y amamanta (no es
esa la función masculina, pero eso es lo que veo ) cuando él bebe se mueve,
tiene en los ojos una membrana lechosa, como la catarata de los ojos enfermos.
No ve, asustado, que la fuente de alimentación le sostiene, no la siente debido
al miedo. Siento que ese niño somos la humanidad entera. El canto del Om del
Mantra es el llanto del recién nacido que reclama la leche materna; hay mucha
ternura en esos brazos que sostienen sin apretar. Él bebe no puede saber que
por el hecho de no ver, no significa que no haya luz, ni amparo ni alimento.
El retorno del día es quitar esa película
de los ojos de la humanidad. El hombre Santo continua en el centro. Siento que
estoy en el aire, nos levantamos y sacudimos el cuerpo, luego al sentarnos de
nuevo, nos tomamos las manos y continuamos, la mano derecha me coge cargada de
amor, la izquierda viene unida a miles de manos, siento a Montse que está
frente a mí y su pecho y el mío esta están fundidos en un lazo, noto la ternura
de mis compañeros y la necesidad de abrazarles, pero continuo con el canto
hasta que finalizamos. ¡Bueno, por
ahora!
( Manoli Castro )
Se celebra en el mundo de tradición hindú
la Gran Noche de la Shivarati, la Gran Fiesta de la prolongación de luz sobre
la oscuridad, nosotros preparamos el escenario para sumarnos a ella, para
muchos es una novedad, aunque lo hayamos celebrado en años anteriores,
realmente sentir la profundidad de lo que representa... estamos lejos aún, pero
vamos a disfrutarla.
Hay una piedra que por sí sola, muestra la
fuerza de la vida, está hueca, tiene tres líneas blancas pintadas, son los tres
mundos en que el ser humano se mueve, el mental, emocional y el visceral o
energético, en el centro de los tres, un punto rojo, el ojo de Shiva que todo
lo ve.
Aunque en occidente el símbolo del
generador de vida masculino sea escandaloso, todas las culturas lo veneran, sin
la semilla primigenia no hay continuidad. De ella se vale la naturaleza para
manifestar la vida año tras año.
Ponemos en su interior algunas joyas, está
hueco y aunque somos muchos, nos vamos turnando, actúa como un relicario, está
apoyado en un soporte por donde puede circular agua, vino o cualquier liquido
que al derramarlo, se bendice con la intención de bendecidnos a todos.
Hay frutas y alimentos, es una fiesta por
todo lo alto, todo está listo, unas imágenes de Shiva y Sakti están presentes
para recordarnos los detalles de los que se vale la Divinidad para sentir en el
mundo físico.
Sentados y totalmente inmóviles, sentimos
los ornamentos que lleva, los pendientes, las pulseras, los brazaletes, etc. Al
principio sólo siento el cuerpo y esos puntos algo mas intensos que el resto,
pero no llego a más, a medida que incorporamos el canto, la sensación de
abandono dá paso a otra forma de sentir la energía, veo el símbolo de Om en mi
cuello, y un par de centímetros por debajos del ombligo un dibujo similar, es
una serpiente en forma de ese, es lo mas parecido aunque no es exactamente eso
tampoco.
Tenemos que terminar pronto la jornada,
sólo unas pocas marchamos, el resto continua, Me siento embriagada, no tengo
ganas de hablar, ni de estar en el tumulto de las gentes.
Julia y yo llegamos a casa en silencio, ¡¡
cosa insólita en nosotras!!
........ por la tarde
Continua la fiesta y puedo aprovechar de
unas horas, no podré terminar con todos
ellos, pero por lo menos tengo un tiempo.
Las sala está “caldeada” vamos a comenzar
con la atención al cuerpo y a los detalles, como en la mañana. Todo es mas
fuerte ahora, a pesar del intermedio en casa
a la hora de comer. Después comenzamos con le cántico, unimos las voces.
Se me olvidó, ésta primera parte utilizamos
las pulseras y nos pintamos con ceniza de Sándalo en la frente, mas o menos
tres líneas y en el centro un punto rojo. Con cada mantra, pasamos una cuenta
del collar hasta completarlo.
Cuando quedamos en silenció, veo un ojo,
está en el centro del circulo que formamos, lo siento vivo, nos observa y atrae
a la vez, siento la parte alta de la cabeza muy activa, la energía que sube por
la espalda y sale por aquí, se une a otra que llega del cielo, siento que soy
como una marea de agua, el ojo abierto absorbe primero el agua, después se
agiganta, puedo ver el iris, es todo el universo, la vida que despide es la
vida en el cosmos, la pupila, negra es como un agujero que me arrastra, mejor
dicho nos arrastra a todos, nos va cubriendo hasta quedar dentro de él. Siento
que hemos entrado en el interior de ese ojo inmenso, luego se cierra, todo
queda oscuro, por un momento me inquieto, sólo hay oscuridad, no oigo a mis
compañeros cantar, estoy sorprendida, pero no asustada, me limito a sentir,
esos segundos de oscuridad, todo se ha detenido, luego hay un estallido de luz,
como si me hubieran golpeado la cabeza, hay chispas, la luz es blanca, el
sentimiento que me llega es el del primer instante de la creación, sé con total
seguridad que lo que podamos desear, lo que hagamos tiene la conformidad de
Dios, es un momento en el que se nos otorga el poder de crear lo que queramos,
todo se hará real.
No quiero interrumpir, continuo hasta el
final, cuando hacemos un pequeño intermedio, pregunto a Joan, ¿Qué es lo que,
si pudieras tener la seguridad de que se cumplirá, pedirías?. Le comento que
ese momento mágico es de todos, que seria bueno hacer algo común, que todos
sean conscientes de eso.
Cantamos y nos balanceamos rítmicamente,
formando una piña, es la primera vez que puedo sentirla, compacta, firme, Me
siento feliz.
Salimos un momento Maite, Tania y yo a
fumar un cigarrillo, éste tiene otros elementos que no son solamente tabaco, quería
probar en un momento así, con el estado acrecentado de conciencia, mi cuerpo
sintiendo a una capacidad duplicada. No tomo demasiado por si acaso.
Cuando seguimos con los cánticos, cierro
los ojos y siento todo el espacio, en mi interior parece que vaya a saltar por
los aires, no sé si duele, pero el placer de sentir es inmenso, cada
centímetro, el pecho abierto de par en par, puedo sentir a mis compañeros, veo
las estelas de múltiples colores que les rodean, como se mezclan con la
proximidad, poco a poco, desaparecen de la vista, somos todos unas siluetas
llenas de luz, es muy fuerte, se mueven y cambian de intensidad. Me elevo y veo
que más allá de nuestro local, compartimos la fiesta con multitud de seres.
Unos a la misma hora, otros con los preparativos, todos somos una silueta llena
de luz, no veo la conexión hasta que salgo fuera de la tierra. Todos formamos
una gigantesca flor, con millones de pétalos, que se abre y balancea continuamente, sólo entonces, me
doy cuenta que somos la representación del la flor de los mil pétalos en la
cabeza de Shiva.
Comienza a subir el efecto de lo que he
fumado, me noto disociada, la cabeza empieza a montar una escenografia de
imágenes y sonidos, no puedo controlarlos, mi compañera me habla de cosas triviales
y me dejo arrastrar por la conversación, soy consciente de que estoy
desperdiciando la oportunidad, pero es mas fuerte que yo.
Me intento agarrar a la sensación corporal,
a la respiración, tengo que dejar de cantar, mi boca pronuncia las palabras,
pero estoy en otra parte. Me hablan y respondo, pero la magia se me escapa.
Llega la hora de marchar, no sé cuantas
tonterías habré dicho, no puedo dejar de valorar la fuerza con que mi cuerpo
respira, cada célula tiene consciencia, estoy en todas partes, es fantástica,
pero la motivación, la he perdido. No quiero repetirlo así, prefiero que sea más
suave, pero que, precisamente no haya ni una porción de mi persona que vaya por
libre.
Hoy es un día especial, como todos los días
tienen una finalidad determinada, en ‚ ocasión se trata de evocar el descenso
dela luz divina durante toda la jornada e incluso si es posible, también la
noche, mediante el canto se reclama la presencia de Shiva y la Saetí.
Ante un pequeño altar, colocamos fruta, agua,
flores y uncestillo donde depositamos objetos personales para que sean
bendecidos por la Divinidad.
Nos pintamos tres líneas blancas en la
frente y un punto rojo entre los ojos, después‚ con unas pequeñas calabazas
huecasrellenas de arroz comenzamos un canto, el sonido ayuda amovilizar la energía
y a mantenernos centrados en el propósito,el canto es una canción, de llamada
al Señor.
Siento como las líneas pintadas y el punto
pican y es inevitableno prestarle atención, pero al mismo tiempo tratar de
estar en lamúsica, sentir el cuerpo y cantar a la vez es complicado, tal vezsea
que pretendo hacerlo tan bien que no me dejo ir con soltura yolvido lo
esencial, sentir.
Poco a poco, las líneas horizontales de la
frente parecenestirarse hasta salir del límite del cráneo, como si a la vez meabrieran
la cabeza, es placentero. El punto rojo del centro de lafrente, sigue igual,
salvo que ahora hay más luz delante de mí.Trato de cantar al ritmo de mis compañeros
pero alguien a mi ladova demasiado acelerado y me cuesta seguirle, el tono que
empleoes dulce y bajito, estoy llamando a Dios, la voz sale del corazónmas que
de la garganta, como deseo ir al compás de los demás,levanto mas la voz, pero
las que se mueven aceleradamente son mismanos, con los sonajeros improvisados y
llego a un conflictoentre lo que quiero y lo que se supone que debo hacer.
Llegado a este punto, decido simplemente
sentir, canto ahorabajito, casi para mi y me aíslo del resto, entonces reciborespuesta
a la llamada. En primer lugar, siento los símbolo queShiva lleva en la figura,
tres culebrillas enroscadas a modo debrazalete en la parte alta de los brazos,
el cabello se vuelvelargo hasta adoptar la forma del manto de los santos y místicos
cristianos, cubre mi cabeza, hombros y sedesparrama a mi alrededor cubriéndome
totalmente, en los pezonessiento unas pequeñas serpientes enroscadas, semejante
a los arosque hoy en días, se ponen los jóvenes en varias partes del cuerpo.
Empiezo
a sentir la excitación que precede a la llegada de unser muy querido y largo
tiempo esperado, el centro de mi pecho seabre y se llena de dulzura y calor,
aparece delante una corona deflores, cada pequeña flor, toca distintos puntos
de la cabeza, lamas grande se abre, como lo hacen las flores cuando necesitan
elcalor del sol.
Siento la energía circular en mi interior,
en la espalda, untubo de luz es en lo que se ha convertido la columna vertebral,
sube desde la base y sale de mi cuerpo estirándome hasta el techo, para caer
sobre todos los presentescomo una cascada.
Debajo de las nalgas, aparece una piel de
tigre, tiene enprincipio la función de alfombra o eso es lo que parece, pero setransforma
en un remolino de colores entre rojos y dorados, me harecordado la visión que
tuve de un yogui cuando meditabasuspendido en el aire.
El canto continua, pero es un autentico
anhelo, siento lanecesidad de que la Divinidad entre en mía para así fusionarme
conella, comprendo ahora esa nostalgia que me invade tantas veces ypara la que
no tenia explicación, la necesidad de rezar, siempreestaba encaminada a ese
fin.
Empiezo a ver las tres líneas pintadas en
la frente, como vandesapareciendo y a la vez desaparece también en la cabeza,
se haconvertido en tres esferas llenas de puntos luminosos y están muydistanciadas
unas de otras, en el centro permanece el puntorojo, que se vuelve un ojo vivo
que observa, por un momento mesiento extraña porque estoy viendo desde el
ángulo de ‚Este ojo ya la vez desde mi posición todo al mismo tiempo,
siento vértigo,pero no miedo. La parte de la cabeza que ahora se ha convertidoen
tres esferas, quiere desligarse del resto del cuerpo,permanece unida al tronco por
la zona de la garganta. Shiva estaen la posición del loto, tiene las manos
abiertas y vueltas haciaarriba a la altura del vientre, en ellas descansa el
mundo, El loalimenta con su propia energía que extrae de esa zona, nosotroslos
humanos, dormimos, nuestros movimientos son espasmódicos,similares a muñecos
que no controlan, como si tuviéramos muelleso resortes. El nos ama, pero desea
desligarse, volver al cosmosde donde procede, a la vez, siente misericordia ‚esto
sentimientos le provocan un nudo en la garganta, por momentostengo el impulso
de gritar que en el mundo todavía hay seres que tienen fe, la de esas personas,
que como niños, sienten que Diosnunca les abandonar À, que merece la pena
que continúe sosteniendo el mundo.
No se si Shiva llora, pero yo si, en mi
garganta el nudo no espor emociones atascadas, es mas bien la impotencia que
siento.Estamos ya casi al final, paramos para sentir la energía circularpor el
cuerpo, dirigirla en todas direcciones y de ‚Este modoalimentarnos cuando es
el momento de volver a la vidaordinaria, me cuesta adaptarme, es tan brusco el
cambio que memarea, contemplo el altar y la figura de Shiva, y cambia otravez,
de ser una figura religiosa normal se transforma en unsolo ojo que me
contempla, es como una despedida, esto meconsuela ya que es difícil
tocar el cielo y tener que volver a latierra con las limitaciones y el atuendo
humano, se ese ojo, saleun rayo de luz con la fuerza de un láser y se dirige al
techopero no de la sala, sino que la traspasa, sale del Edificio y sedeja caer
como una lluvia de luz sobre la tierra.
......................................
Continuamos con la celebración de la
Sivarati, cuando sentimos los elementos que tienen las figuras de las láminas,
parece que el cuerpo está receptivo, noto con especial fuerza las serpientes
que se enroscan en los brazos, no pulseras, son serpientes, en las muñecas, los
tobillos, en los penzones. El cabello es como el agua que resbala por los
hombros y llega a los pies. En la frente se me abre un ojo en el centro, mis
ojos físicos desaparecen, pero no tengo conciencia de ser un .... (no recuerdo
ahora la figura mitológica). Todo el paisaje cambia al ver a traves de ese ojo,
todo es armonía perfecta, por un segundo, o mejor por unos segundos soy
conciente de que todo está encajado, hasta lo que consideramos inacabado, o
malo o imperfecto, todo se entiende.
Después éste “conocimiento” da paso a otra
visión, me encuentro sentada en la cima de la montaña que se ve en el dibujo.
Desde ésta Atalaya Siva extiende la vida, el cabello crece hasta cubrirla
totalmente, es como el agua. No soy Siva, pero parece que El adopta las formas
para su mejor comprensión.
Cuando finaliza la meditación, necesito un
tiempo para saborearlo bien.
Nos despedimos con una nueva bendición de
la piedra, primero con agua, después con vino sin alcohol.
Manoli Castro