La cultura artística y el espíritu de un pueblo suelen ir parejos, así las acuarelas paisajistas japonesa, en su periodo clásico denota austeridad e impecabilidad, donde la naturaleza es protagonista y el elemento humano es solo un pincelada mas, que busca integrarse. La naturaleza es un bien supremo, por donde el hombre debe transitar con respeto, sin perturbarla. El el autentico espíritu del Sintoismo y del Budismo Zen. La música sigue la misma pauta, austeridad y conciencia. Lo bello es el trazo no la figura que representa, la fuerza es mas importante que el hecho. También la utilización de la frecuencia musical de 432 Hz, es el intento por recuperar la Armonía Universal, pedida como la autoconciencia, caemos en una hipnosis colectiva, manipulable, solo volviendo al origen sabemos donde estamos, quienes somos y cual es nuestro propósito.
Espacio de espiritualidad compartida y meditación. Divulgación de temas para un cambio colectivo. Crónicas sobre la ascensión y divinización de la Tierra.
Mostrando entradas con la etiqueta arte japones. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta arte japones. Mostrar todas las entradas
Suscribirse a:
Entradas (Atom)